sábado, 4 de octubre de 2008

Bestias asesinas


4 comentarios:

Roedor dijo...

Todavía estoy temblando por el recital del viernes de estos tipos.

La primera vez que supe de ellos fue hace muchos años, una de las veces que viajé por laburo a USA, hace bastante más de 10 años. En uno de mis momentos de hacer huevo, me metí en un shopping (eran otras épocas) y en un Sam Goody's (cadena de discos gigante y como tal ahora difunta) estaban pasando el disco "Under the table and dreaming". Sin hesitar, le dije al mono del mostrador que lo pase por la maquinola y que me lo envuelva para regalo (para mí). Desde ese momento no paré, y Matthews no hizo las cosas mucho más diferentes de lo que se escucha ahí. No lo necesitaba, tampoco.

Más allá del chiste macabro de que el reemplazante del finado LeRoi Moore (saxofón) fuera un tipo de apellido Coffin (ataúd), que tocó con gente grossa, la banda simplemente me despeinó, como lo preveía.

Mi hijo mayor dijo "sep, nada del otro mundo, siempre zapan sobre la misma nota", pero con una energía y un ajuste inusuales, no tan raros teniendo en cuenta que todos tocan juntos desde hace casi 20 años, exceptuando al mencionado Coffin, que hizo un solo imposible sacándose chispas con sus "nuevos" compañeros.

Para recordar queda la potencia del baterista Carter Beauford, que no sólo tocaba de manera sutil los cencerros al tiempo que hacía un globito con un chicle y dos segundos despues metía 15 golpes de tambor en menos de 1 segundo. Todo el mundo entraba en tiempo, cerraba al unisono, sin siquiera mirarse, y las letras y la música, sin ser grandes descubrimientos de la humanidad, tienen esa cualidad de emocionar por lo sinceras.

Hasta el prolijísimo set previo de Fito Páez (disfrazado de Elvis Costello y con sonrisa canchera posiblemente a causa de que es altamente probable que se esté embambinando a su ahora corista Emme), quedó pálido ante tanta contundencia.

Como dije en otro lugar hace poco, no hace falta que venga Zappa para que yo me emocione. Basta con que alguien toque con convicción, justeza, sinceridad y fuerza para que las cosas cierren.

El veterano guitarrista eléctrico invitado, Tim Reynolds, hasta se dio el lujo de citar a Hendrix en el cover de "All along the watchtower" de Dylan, un clásico en los sets en vivo de Matthews. Sobre el final, metió una cita casi literal del solo de Page en "Stairway to heaven", cinco escalas ultrasónicas y listo, sin sudar nos dejó pasmados.

Cuéntenme cuánto hace que no ven un recital con esos ingredientes producidos por presuntos figurones locales.

Quedará para el recuerdo la interrupción involuntaria de unos 5 minutos cuando un desperfecto eléctrico dejó al escenario desconectado. Matthews pidió disculpas por un inconveniente que él no había producido, se bajó del escenario a estrechar la mano de la gente, y después siguió.

Fue un recital de rock. Hacía un rato que no iba a uno.

Anónimo dijo...

los estoy escuchando en este preciso momento. No sabía que Dave Matthews era sudafricano, y que además ha incursionado como actor. Casualmente lo vi hace poco en el Stand Up For A Cure 2008. Saludo.

Anónimo dijo...

me olvidaba: excelente video este:
éste
(no esperen Crush, ése ya es bien conocido)

Anónimo dijo...

Que hot es este tipo, a pesar de ser enano y retacón. Personalidad, le dicen.