sábado, 23 de febrero de 2008

Bliss

Hoy a la mañana, inmediatamente de levantado, escuché 3 (tres) veces seguidas este disco:



Todavía hay cosas que no puedo creer. Entre ellas, que un tipo a los 23/24 años haya compuesto él solito (casi) todo lo que se escucha ahí, habiendo tanto nabo cuarentón que precisamente más de 40 años después de eso todavía no mete dos acordes seguidos en tiempo, y encima se llena de guita...

I guess I just wasn't made for these times.

Have a nice Saturday. Yo seguro que ya lo tengo y lo voy a tener...

viernes, 15 de febrero de 2008

Miedo

El miedo (y su mamita perversa, la incertidumbre) están en muchos de los aspectos de nuestra vida.

Y eso me da miedo.

Exhibit 1:

La industria del seguro en general está basada en el miedo: vos pagás por la eventualidad de que te ocurra algo. Es algo evidente que la industria en sí existe porque la ocurrencia de siniestros es notoriamente menor a los que contratan el seguro. De otro modo, estarían en bancarrota.

Exhibit 2:

Recuerdo que hace unos años trabajaba en una empresa que vendía productos de muy alta calidad, pero también de muy alto precio. Me niego a llamarlos caros, porque esto implica que la expectativa de performance es superior al valor percibido del precio.

Esta última frase es buena, ¿les gustó?

Entonces, cuando uno trataba de convencer al cliente, uno de los atributos (beneficios se le llama en marketing, es una ventaja competitiva que se traduce en dinero o algo parecido) era el peace of mind.

Peace of mind.

Pajaritos en el aire primaveral.


El tipo se había gastado una pequeña fortuna con la sola, triste, solitaria recompensa de que iba a poder dormir tranquilo. Eso por ahí se justificaba cuando se trataba de alguna obra de envergadura (era un insumo para construir determinadas cosas), donde una falla implicaba casi seguro un accidente y un golpe de imagen serios.

Pero el peace of mind, aunque traducible en dinero si uno se pone quisquilloso, no deja de ser un engaña pichanga, como decía mi abuelita la gallega.

El seguro (y la venta de ese tipo de productos, como la de un artefacto para el hogar que vale el triple que otros similares) trabaja con tu miedo, con el mío, con el de ese señor que tiene peace of mind... después de sacar la chequera del cajón.

Exhibit 3:



Pancho Ibáñez desde la tele te dice que tomes el yogurcito pedorro: los estudios de mercado ya dijeron que eso de andar haciendo el desafío con guita propia era una avivada de aquéllas: ahora te van a regalar botellitas. Me consta. Mis hijos andaban con esa cosa chorreando por las comisuras la última vez que fuimos al Carrefour. Pero lo que viene después es lo irritante:

- Una señorita saludable en el gimnasio "desprecia" la utilidad del brebaje "porque hace vida sana", etc. Acto seguido, una gimnasta le estornuda en la cara. La mina siente miedo...
- Un ama de casa moderna y medio fuertona, con mirada sobradora, dice que sus hijos "no necesitan" porque, entre otras cosas, ella está todo el día con ellos cuidándolos, justo cuando un pendejo agarra el plato de comida del perro o un juguete o ambas cosas que había sido previamente baboseado por el can. El ama de casa siente miedo...

- Un señor con atuendo deportivo, corredor tipo nike elonga y pelotudea al aire libre urbano y se ufana de ser un winner, justo cuando se larga una tormenta de la hostia y estornuda o tose o se caga de frío o todo eso junto. El huevón siente miedo...

Exhibit 4:

Una comedieta en prime time más en la eterna cadena de carnizas, tacheros, plomeros, soderos y otros oficios dignos nos muestra a un par de porteros (jamás encargados) en el proceso de enamorarse. Ambos son entrados en años (quizás uno más que la otra) y en carnes (esto no tiene nada de malo, a ver si Ms. Poppins se me enoja de nuevo...).

A la semana de emisiones hay avisos de gráfica en todos lados estimulando a la gente para que vea el programa porque "ya es parte de tu vida".

Qué triste que debe ser tu vida si una parte son los chistes malos del yerno de Altavista...

Pero la gente lo mira, lo ve y lo comenta, porque siente miedo de no sentirse integrada si al día siguiente en el ámbito que sea no sabe si efectivamente a pirulo le dio positiva la prueba de ADN, metodología que según la tele de los últimos tiempos es tan corriente como ir y tomarse la presión en la farmacia.
Miedo, más miedo de no pertenecer a lo que no queremos o no tenemos necesidad de pertenecer.

Exhibit 5:
Textual porque no está para sacarle ni ponerle una coma, escrito por la Incondicional. No te enteraste de que te lo afané, pero gracias igual.


A veces me pregunto qué sentirá un pollito mojado. Con las plumitas pesando más de lo habitual por el agua, helado de frío hasta los huesos, con la cabeza embotada y sin saber adonde ir. Terror, soledad, desamparo. Y miedo. Mucho miedo.Y cuando pienso en esto empiezo a envidiar al pollito. La verdad es que tengo miedo todos los días de mi vida. Y no son solo algunas cosas las que me dan miedo, sino todo. Absolutamente todo. Pero a nada le temo tanto como a la incertidumbre. La vida es una gran catarata de miedos. Solo que, paralizarse frente al miedo o poder expresarlo, es un lujo que le está reservado a unos pocos. Y, a diferencia de los pollitos mojados, no es un lujo que –en lo que llevo de vida- haya podido darme.

Exhibit 6:


Autoexplicativo. Pero hoy no tengo ganas de traducir.




Que duerman bien.

Si pueden.

(acá vendría audio de Vincent Price al final de la canción Thriller de Michael Jacskon).





jueves, 14 de febrero de 2008

Las cosas como son

Esta es una CUBIERTA DE COMPACT DISC. Este texto es el DISEÑO de la cubierta. El DISEÑO es para ayudar a VENDER el compact disc. Esperamos llamar tu atención hacia él y alentarte a que lo tomes. Cuando hayas hecho eso, quizás estés persuadido de escuchar la música, en este caso el album Go2 de XTC. Luego, queremos que lo COMPRES. La idea de esto es que cuantos más de ustedes compren este compact disc, más dinero van a ganar Virgin Records, el manager Ian Reid y XTC propiamente dicho. Para los antedichos, esto se conoce como PLACER. Un buen DISEÑO de cubierta es el que atrae más compradores y da más placer. Este texto intenta atraerte del modo en que lo hace una imagen atrapante a la vista. Está diseñado para hacer que vos lo LEAS. Esto se llama atraer a la VÍCTIMA, y vos sos la VÍCTIMA. Pero si tenés una mente libre debes PARAR DE LEER AHORA! porque todo lo que estamos tratando de lograr es que vos sigas leyendo. Sin embargo esto es un DOBLE ENREDO porque si vos efectivamente parás, estarás haciendo lo que te decimos, y si seguís leyendo estarás haciendo lo que queríamos desde un principio. Y cuanto más sigas leyendo, más vas a caer por este simple artilugio de decirte exactamente cuán bien funciona un buen diseño comercial. Son ENGAÑOS y este es el peor ENGAÑO de todos dado que está describiendo el ENGAÑO al mismo tiempo que tratamos de ENGAÑARTE, y si ya leíste hasta acá, entonces has sido ENGAÑADO, pero no te darías cuenta de esto a menos que hayas leído hasta acá. Por lo menos te lo estamos diciendo directamente en lugar de seducirte con un hermoso y cautivante elemento visual que nunca te habría dicho nada. Te estamos haciendo saber que vos debés comprar este compact disc porque en esencia es un PRODUCTO y los PRODUCTOS están para ser consumidos y vos sos un consumidor y este es un buen PRODUCTO. Podríamos haber escrito el nombre de la banda en tipografía especial de modo que se destaque y la habrías visto antes de que leyeras algo de este texto y posiblemente lo habrías comprado de todos modos. Lo que realmente estamos sugiriendo es que vos sos lo suficientemente TONTO como para comprar o no un compact disc meramente como consecuencia del diseño de su cubierta. Esto es una estafa porque si vos estás de acuerdo entonces probablemente te gusta este texto, que es el diseño de la cubierta, y por lo tanto el disco que está dentro. Pero nosotros ya te lo advertimos. Una estafa es una estafa. Se considera bueno a un diseño de cubierta que hace que compres el disco, pero eso en la realidad nunca te pasa a VOS porque VOS sabés que sólo se trata de un diseño para la cubierta. Y esta es una CUBIERTA DE COMPACT DISC.


Cubierta de la edición en CD del álbum Go2 (1978) de XTC. Diseño de Storm Thorgerson del estudio Hipgnosis, en una época una usina creativa de cubiertas de discos. Las versiones originales en vinilo y cassette (qué antigüedades) decían "LP" y "cassette" respectivamente en lugar de "Compact Disc". Traducción por el Roedor. Texto original aquí abajo. ¡Ah! Además es un flor de disco...




lunes, 11 de febrero de 2008

King for a Day: Cómo componer, arreglar y ejecutar una canción pop

Ya a esta altura perdí la cuenta de cuántos clips de XTC he posteado por acá.

Pero esto es un sacerdocio para la conversión de infieles, por supuesto.

Esta versión es de fines de los '80's, y es curiosa porque es en vivo en el programa de David Letterman (a quien Pettinato le robó todo, literalmente). Se ve la tapa del disco de vinilo (que yo también tengo), y el que lleva la voz cantante es Colin Moulding, la mitad menos prominente del grupo (o el tercio, para los exigentes).

También tocan con Paul Shaffer, director residente del grupo del programa de Letterman, un monstruo (pero que no toca exactamente las partes como están en el disco). Un comentarista del video de youtube dice que el bajista es Will Lee, otro bestia.

Yo escucho y escucho a esta banda y no puedo comprender porqué no son tan famosos y prestigiosos como los Beatles o los Beach Boys. Quizás porque vinieron después de ellos y tienen influencia de ambos. Pero sigo sin entenderlo.

Enjoy.

domingo, 10 de febrero de 2008

Ellas saben más


Ok, la señora de la foto no es mi tipo de belleza femenina.

Pero el otro día, cuando me asomaba a mi balcón, vi en la vereda de enfrente la última campaña de una conocida marca de productos cosméticos femeninos. Una morochaza rulosa madura por acá (esa de la foto), medio en bolas, una señora en sus 50 largos rubiona por allá, cero ropa también...

Cosa rara. Hace mucho que esa gente (esa compañía) sabe dónde atacar para conseguir más plata.

Pero la cosa no pasa por ahí.

Hubo alguien que lo escribió mucho mejor que yo, hace tiempo, y está en internet. Pero no recuerdo dónde ni quién es.

La idea fuerza es: las señoras maduras tienen algo que las otras no tienen.

Celulitis, una de ellas. La mayoría, digamos. Pero tampoco pasa por el ideal de belleza femenina photoshopeado.

El tipo que escribió eso lo hacía muy bien, por eso ahora vos tenés que contentarte con estos balbuceos conceptuales mal escritos.

Una mujer madura tiene, además de celulitis: muchos amaneceres después de noches sin dormir; hombres increíbles y zapallos imposibles; olores y percepciones que la hacen un objeto y un sujeto sensual (no sólo sexual) permanente; sesiones de sexo mientras el niño llora en la otra habitación; el conocimiento de saber dónde acariciar para que a uno le vibre la médula espinal de principio a fin; historias con sustancias varias, de las buenas y las "malas" que han pasado por su cuerpo; paciencia e intolerancia por partes iguales ante nuestras típicas actitudes machistas; oficio para lograr que lo que suba no baje (ejem); sentido del humor para cuando la baja amenaza con ser permanente, al menos por el resto de la velada; un libro de más; una peli mirada que no debía ser mirada (pero lo fue), la respuesta justa y el detalle casero adecuado ante pequeños accidentes (no sólo físicos); en resumen, haber vivido situaciones, que de eso se trata la vida.

Uf.

Las pendejas que juegan voley en el club donde voy tienen culos antropométricamente casi perfectos. Están muy buenas. Soy compañero de equipo de... ¡sus padres! Out of the race, automatically. Son bellísimas, calculo que en no mucho tiempo seré un viejo verde que mirará con más detenimiento tanto despliegue de músculos moviéndose armónicamente.

Pero no ahora. Ahora quiero, necesito, alguien que ocasionalmente esté un paso delante y un paso detrás de mí. Que me sorprenda con cosas con las que antes, en algún momento, sorprendió a otro, para que yo a mi vez haga el equivalente. Quiero vivir historias. Quiero una mujer que las viva. Quiero mujeres con historia. Aunque esa historia implique convivir con pequeños huequitos en los muslos.

En eso estamos.

Mentime que me gusta

Miren que lo intenté y no lo logré, ¿eh?

Estuve buscando putamente el afiche local de la peli esta, que no vi ni pienso ver en mi vida, pero no lo encontré, parece que lo tienen nomás en los locales. En cualquier momento me pongo la máscara de Scream y me voy por la avenida Cabildo a afanarme uno, sacarle una foto, y postearlo acá.

El afiche local (update: ¡Gracias, Stella!), debajo del título, reza:

Basado en una historia real. (en realidad en los cines es así, el que encontró Stella es este, que es más o menos lo mismo):

Ja.

Decirme eso antes de ir al cine, es como que una mina me comente que en los momentos íntimos no puede contener determinados fenómenos fisiológicos considerados vergonzantes. Huyo despavorido.

Yo una vez conocí a un tipo que laburaba conmigo, unos cuantos años menor que yo (o sea, tenía toda la historia de desmitificaciones varias a su favor), me espetó: "A mí me gusta ir a ver películas que estén basadas en hechos reales".

Poqué, inquirí yo, con tono infantil ad hoc.

"Porque si no todo es un delirio, algunas películas te cuentan cosas que sabés que no pueden pasar, y yo no puedo perder el tiempo mirando boludeces que no existen."

No es textual, pero casi, todavía lo tengo grabado en la cabecita.

El diálogo anterior aconteció en los primeros días de septiembre de 2001.

A mediados de ese mes, luego de comentarle la última película que había visto (porque en el fondo no era mal tipo), le dije:

"¿Vos habrías ido a ver una película donde un grupo de locos se afanan dos jumbos y los estacionan en el piso 40 o por ahí de dos edificios históricos en la ciudad más importante del mundo, en vivo y en directo para la tele?"

No me jodan con la realidad, por favor, que para eso ya tengo a la realidad, ¿saben?

The Beautiful and Damned

Una de las cosas que siempre me llamó la atención es que, al menos en el mercado de libros argentino, quizás no tanto el español, no había traducción de la inmensa mayoría de la obra de Francis Scott Fitzgerald (1896-1940).

Hasta hace poco, no había ninguna traducción al español de casi nada en las librerías porteñas.

Salvo El Gran Gatsby, que fue llevado a la pantalla en la década del '70. Yo no vi esa peli a su estreno porque era muy chico y luego de leer el libro de grande pensé que nadie, ni el más brillante director interpretador de maravillas, podía hacer algo bueno. No pienso darle la oportunidad, porque siempre me pareció que esa peli era una excusa para que el vestuarista se gane un Oscar.

F. Scott Fitzgerald es considerado uno de los padres de la novela moderna estadounidense junto con Hemingway, John dos Passos y alguno más, difícil encontrar a alguno de los tipos que vinieron después (y que ya se murieron o están a punto de) que no haya reconocido su influencia.

Yo leí en inglés, en bellas ediciones de Penguin, todas sus novelas y casi todos sus relatos.
The Beautiful and Damned (traducida como "Bellos y Malditos") es una novela publicada en 1922, y cuenta la historia de Anthony Patch y su esposa Gloria, la pareja ideal, destinada a las grandes cosas, que por una cuestión legal y casi de "merecimiento" las pasan muy duras hasta encontrar la supuesta "felicidad", que no es tal y les llega (muy guacho el Scottie) en la última página de la novela. No les voy a contar el argumento, pero es un desaparramo de vida disipada, de vivir beyond their means, y esas cosas tan decadentes que otros imitadores intentaron luego emular, y todavía intentan, y no logran.

F. Scott Fitzgerald era un tanto desalmado, había nacido en St. Paul, Minnesota, que en ese momento era un pueblito de mierda conectando el Este y el Oeste, y murió en la Costa Azul, luego de haberlo vivido todo, la gloria y la humillación, casi como los protagonistas de la novela. Siempre despreció su origen, pese a que todavía lo recuerdan en el Rice Park.

La relación tormentosa con su esposa Zelda, que algunos dicen reflejada en esa novela precisamente, siempre fue un misterio: oficialmente escribieron algunos cuentos "a dos manos" (están publicados y son muy buenos), pero se sospecha que eran 100% de ella, que murió en un incendio de una institución mental donde estaba recluida, ocho años después de su marido.

Releyendo esta novela el otro día, pensaba porqué en este lugar del mundo no contábamos con el privilegio de leer a uno de los pioneros, y después me quedé pensando en que quizás había demasiado color local, demasiados códigos internos de gente que vivía de manera muy acelerada antes del LSD y otras cuestiones. También pensé que quizás los editores nos querían salvar un poco de tanta desolación puesta en letras, tanto pesimismo y desconfianza profunda en la humanidad en sí. Tanta cáscara brillante y tanta mierda dentro. Porque eso es lo que impresiona de F. Scott Fitzgerald: no hay personajes más monstruosos que los suyos.

Pero lucen tan bien.